Un analista es invitado a presentar un relato de su praxis a la escucha de otro analista al cual haya elegido para la ocasión, por transferencia. Este podrá hacer preguntas, incidencias o solicitar precisiones, etc. respecto del suceder del relato presente. La extensión de la presentación no podrá exceder los 50’, lo cual será sancionada por el analista que escucha.
Una vez concluido este momento del artificio, el analista presentador se llamará a silencio, retirándose de la escena. A partir de la puesta en función del coordinador de la actividad; se hará circular la palabra en el público y cada uno que así lo requiera podrá intervenir con sus comentarios y reflexiones acerca de lo escuchado, en el intento de fabricar un caso clínico. De su ocurrencia, lo que habrá sido fabricado como caso será aquello que ha caído de un trabajo de transferencia a partir del relato y de los aportes y comentarios de los asistentes, con ese carácter impredecible y azaroso que ponemos en la cuenta de nuestra praxis que soporte ser tal.